El presidente del Gobierno Pedro Sánchez acaba de anunciar un nuevo punto de inflexión en la carrera por dejar atrás la pandemia: el fin de la obligación de llevar mascarillas al aire libre, que se hará oficial el próximo 26 de junio. «Este será el último fin de semana con mascarilla en los exteriores», ha anunciado el responsable del Ejecutivo.
Después de un año, las mascarillas empezarán a replegarse, limitando su uso a espacios cerrados o aglomeraciones en las que no se pueda respetar la distancia de seguridad. El ritmo de vacunación ha hecho posible el avance en esta línea después de que cerca de 13 millones de personas hayan ya recibido la vacuna completa y cerca del 50 por ciento de la población haya recibido al menos la primera dosis.
“Me gustaría empezar esta intervención haciendo un anuncio muy importante para los 47 millones de compatriotas en nuestro país. Me gustaría decirles que vamos a celebrar un Consejo de Ministros extraordinario el próximo jueves y en el cual vamos a proponer que no sea obligatoria la mascarilla en espacios libres desde el sábado 26 de junio”, explicaba Sánchez durante su participación en la clausura de la XXXVI reunión del Cercle d’Economia.
Países como Francia, EEUU, Reino Unido o Polonia ya decretaron el fin de la mascarilla en espacios abiertos.